En medio de los escándalos que cobija al gobierno Duque y su Ministra de las MinTic, surge como si fuera un mal chiste y en definitiva un chivo expiatorio la propuesta de cinco representantes a la cámara, que consideran que el Fútbol Colombiano debe considerarse un Patrimonio Nacional.

los cinco congresistas

Esta iniciativa fue promovida por estos cinco congresistas: Jennifer Arias, del partido Centro Democrático y a la vez presidenta de la Cámara; Faber Muñoz, del partido de la U; Jairo Cristancho, del Centro Democrático; Jhon Arley Murillo, representante de las comunidades afro; y Henry Correal, del partido Liberal.

Al parecer a los honorables congresistas no les pasó por la cabeza que su propuesta generaría una ráfaga de insultos y críticas en las redes sociales producto de la descabellada idea, que nos recuerda que el fútbol no es originario de Colombia y que por ende, proclamarlo como Patrimonio Nacional es sencillamente descabellado.

Jairo Cristancho, uno de los promotores del proyecto de ley, aseguró: “Logramos reactivar la Primera C, ahora trabajaremos porque se declare patrimonio cultural e inmaterial del fútbol profesional colombiano, nuestros jóvenes en las regiones merecen más oportunidades“.

Uno de los artículos del proyecto de ley sostiene que a través de este se le pedirá al gobierno nacional y las diferentes autoridades locales que financien de manera directa o indirecta los torneos, ligas y eventos deportivos del fútbol profesional y aficionado colombiano.

Nos pone a pensar si esta iniciativa surge desde las directivas del fútbol nacional que buscan a futuro, recibir recursos del Estado para subsidiar el patrimonio nacional y así obtener financiamiento del gobierno.

Habib Merheg Marún