Jordan Herzog, mejor conocido como Crimz en el mundo de los gamers, es un joven de 16 años que participa con el equipo Lazarus de Boston, que a pesar de su corta edad, ya es toda una leyenda entre los equipos Fortnite que juegan desde todo el mundo compitiendo por consagrarse como el mejor.

Los padres de Jordan son padres modernos, que han comprendido que el desarrollo de su hijo debe estar por encima de las expectativas sociales, que invocan el estudio y la formación básica como un normal desarrollo de su inteligencia y personalidad.

Sus comprensivos padres han invertido cerca de $17.000 dólares en equipos para que su hijo compita a nivel internacional. Jordan podría ganar hasta 90.000 euros, como mínimo si logra alcanzar las finales y un premio mucho más jugoso en caso de ser el vencedor.

Mientras Jordan sigue su preparación para consagrarse como el mejor, sus padres le permiten dedicar entre diez y doce horas al día en su entrenamiento, entendiendo que para su hijo, esta puede ser una manera de ganarse la vida. Por supuesto parte del trato que debe asumir el joven, es seguir sus estudios desde la casa para culminar su secundaria sin problemas.

De seguro los padres de Jordan Herzog son la clara demostración de la modernidad de esta nueva era llena de tecnología que genera nuevas alternativas de trabajo en los mercados mundiales.

Director: Habib Merheg Marún