OPINIÓN: KICO BECERRA

Definitivamente el gobierno Petro es una verdadera montaña rusa verbal: Subidas y bajadas de vértigo.

Cuando creemos que estamos llegando a la cima, de inmediato empieza una caída libre descomunal y enseguida otra trepada fenomenal; esto ya es parte de nuestro paisaje tropical.

La semana pasada, estando en la cúspide por el concertado salario mínimo, casi de inmediato nos fuimos de culo, con el anuncio de que no habrá más carreteras de doble calzada, porque por ahí solo se transportan en tractomulas, elementos y comida para los oligarcas y el país no necesita infraestructura vial moderna.

Enseguida subimos a la cúspide, con unas declaraciones en el sentido de que no habrá transformaciones constitucionales sobre aumento de su mandato y, casi de inmediato, declara legal la coca, sin ley alguna que cambie el código penal, donde se establece la ilegalidad de ese cultivo (dejo constancia de que estoy de acuerdo con la regulación pero, eso debe hacerse mediante una ley, no por discurso).

De para arriba otra vez con el anuncio de que se perseguirá implacablemente a los disidentes de las FARC, por el crimen de los soldados del Cauca y, al vacío nuevamente, con la incitación a los alcaldes del Pacífico para que no cumplan las normativas e inviertan, sin consulta alguna, los dineros para solucionar los problemas sociales. ¿Si supuestamente cumpliendo con las normas, el 80% de los alcaldes de esa zona van presos, cómo irá a ser ahora?

Subida intrépida con la visita de altos funcionarios gringos y para abajo con las declaraciones a favor del autogolpista expresidente peruano que derrumbó el Castillo, metiéndonos en un lío diplomático con un país vecino; igual de vecino y hermano que Venezuela, con quien ahora tenemos sabrosas relaciones.

Ascenso descomunal con el anuncio de subsidios a jóvenes pobres y descenso infernal anunciando compra de aviones de guerra, a los que se opuso cuando Duque los iba a comprar; cuestan billones de pesos. Con eso se comprarían los 5 millones de hectáreas para la reforma agraria y los 1000 Tractores que se necesitarían; además podría hacer varios kilómetros de caminitos veredales.

Ascenso vertiginoso con las declaraciones del Minhacienda, informando que no se va del gobierno y no permitirá que se despilfarre lo recaudado en la tributaria y, otra vez para abajo, con las palabras de Petro diciendo que, la bajada del dólar se debe a que los narcos invierten su dinero en Wall Street y no en Colombia, en lugar de ser fruto de la confianza en la política monetaria del Min Hacienda.

Ya nos acostumbramos a este sube y baja que durará 3 años y medio más; de la cima a la sima (Google vagos), se llamará este gobierno en el futuro.

Ñapa: Que bueno que ganó Argentina el mundial de fútbol y Suramérica volvió a ser campeón mundial.

Lástima la vulgaridad innecesaria de algunos de sus jugadores que, empañó su gran triunfo deportivo.

Ñapita: ¿Si tiene a Roy, Benedetti, Lizcano y Bolívar, para qué quiere más aviones Petro?